Por Dianet Doimeadios y Liudmila Peña
Aún la tierra tiñe los zapatos. Pero valió la pena: las sonrisas son más sinceras allá en las lomas y la humildad esconde historias de amor y esfuerzo cotidiano.
Mayarí, 7 de la mañana: William -“el jefe”- , un alegre fotógrafo y dos periodistas que estrenamos agendas, llegamos desde Holguín para cerciorarnos de que, en materia de tecnología, el Plan Turquino no diste demasiado de la ciudad. Sigue leyendo